Julio Castro se levantaba a las 4.30 a. m. para llegar a la escuela y dictar clases a sus queridos pupilos. Su esmero fue reconocido por ellos.
El ahínco trae sus recompensas. Julio Castro, un enseñante peruano que trabaja en E.U., fue sorprendido por sus pupilos tras hacerse conocer todo el sacrificio que efectuaba a diario para poder llegar a la escuela secundaria YULA Boys, donde ejercita su tarea de profesor para sacar adelante a sus 3 menores hijos.
La emotiva historia del maestro Castro ha conmovido a más de uno en EE.UU. tras hacerse conocer que se levantaba a diario a las 4.30 a. m. para dirigirse a la colegio de Norteamérica, donde se desempeña como maestro de matemáticas.
Y es que, a falta de un carro, el enseñante de 31 años se retardaba 4 horas en llegar al instituto desde su residencia, situada en el Valle de Santa Clarita al sur de la Bahía de San Francisco en California.
Todos y cada uno de los días llegaba a su hogar a las 9:30 p. m., cuando sus hijos pequeños ya estaban dormidos. Por esta razón, procuró comprarse un auto por menos de mil quinientos dólares estadounidenses y aprovechó su tiempo libre en la escuela para buscar en Google un vehículo en oferta, mas uno de sus pupilos lo vería y decidió efectuarse una sorpresa con el resto de sus compañeros.
Con el fin de ayudarlo, los estudiantes decidieron recoger fondos y efectuaron una campaña en Fb para poder colectar dinero para la adquisición del auto. Sin embargo, las personas se conmovieron con el caso del enseñante peruano y consiguieron conseguir US$ 30.000 para el vehículo.
Una vez que lograron el carro, efectuaron un acontecimiento de “agradecimiento a los profesores”, mas realmente era solo para el enseñante Castro, quien llegó tarde, mas fue recibido y vitoreado por todos y cada uno de los presentes.
“Yo siempre y en toda circunstancia les afirmaba ‘cuando la vida no va como desean, ¿qué hacen? No llores por eso, no te quejes por eso. Solo sé agradecido por lo que ya tienes, y después prosigue adelante. Y un día ciertas cosas buenas van a suceder. Y esa es la prueba”, fueron las palabras del enseñante que recibió un carro de la marca Mazda 2019.